El último hombre visto con la estudiante de EE.UU. desaparecida en Punta Cana lucha contra el trato policial
Karina Tsui y Jessica Hasbun
Un hombre que se cree fue la última persona que vio a Sudiksha Konanki, estudiante desaparecida de la Universidad de Pittsburgh, está pidiendo a un tribunal que le garantice su libertad, cuestionando el trato que le dieron las autoridades desde la desaparición de la mujer de 20 años hace casi dos semanas.
Joshua Steven Riibe, de 22 años de Rock Rapids, Iowa, y estudiante de último año de la Universidad Estatal de St. Cloud en Minnesota, presentó una petición de habeas corpus en un tribunal de República Dominicana, alegando que sus derechos fueron violados por los fiscales, la Policía y el hotel donde se hospedaba, según documentos judiciales obtenidos por CNN.
La audiencia está programada para las 2 p. m. hora local del martes, según los documentos.
Las autoridades de República Dominicana confiscaron el pasaporte de Riibe, dijo a CNN una fuente cercana a la investigación, y él ha permanecido bajo vigilancia policial, aunque no se le considera sospechoso de la desaparición de Konanki ni ha sido acusado de ningún delito.
La fiscal general de República Dominicana, Yeni Berenice Reynoso, entrevistó a Riibe durante más de seis horas el fin de semana, según la fuente. En una declaración previa, los padres de Riibe indicaron que su hijo había sido llevado a la comisaría para ser interrogado en múltiples ocasiones.
Los padres de Riibe también afirmaron que estuvo detenido “en condiciones irregulares” y fue interrogado sin traductores oficiales ni asistencia legal hasta el 12 de marzo. Los fiscales se negaron a hacer comentarios cuando CNN les preguntó sobre esas acusaciones.
Michael Chapman, sheriff del condado Loudon, Virginia, donde vive la familia de Konanki, declaró a CNN que Riibe había sido muy franco con nuestros detectives. El sheriff afirmó no ver ninguna inconsistencia en lo que dijo Riibe.
Se espera que el contenido completo de la solicitud de habeas corpus de Riibe se haga público en la audiencia del martes.
Konanki, descrita por su padre como una joven “ambiciosa” que planeaba estudiar medicina, llegó a Punta Cana el 3 de marzo. Viajó con otras cinco estudiantes de la Universidad de Pittsburgh, según la Oficina del Sheriff del condado Loudon.
Riibe dijo que conoció a Konanki en el hotel cuando él y su amiga se presentaron a su grupo. Los dos grupos de amigos fueron juntos al bar, donde bebieron hasta que “alguien sugirió ir a la playa”, dijo Riibe en su entrevista.
En la madrugada del 6 de marzo, fue vista en las cámaras de seguridad bebiendo con cinco mujeres y dos hombres en el bar del Hotel Riu República. En el video, se ve a Konanki con un pareo blanco mientras abraza y conversa con sus amigos. Se ve a Riibe a varios metros de distancia, encorvado y tropezando en el césped frente al bar.
Luego, a las 4:15 a.m., una cámara de vigilancia capturó al grupo, incluida Konanki, ingresando a la playa, dijo la Policía.
Poco antes de las 5 a.m., las imágenes de vigilancia muestran a cinco mujeres y un hombre saliendo de la playa, según informaron a CNN dos fuentes cercanas a la investigación. Konanki no estaba entre ellos.
Durante su cuarta entrevista con los fiscales el miércoles, Riibe describió un desgarrador intento por salvar a Konanki después de que fueron sacudidos por la ola y ella se cansó de nadar.
“Me costó mucho sacarla. Fue difícil”, dijo Riibe, según Noticias SIN. Dijo que tenía formación como socorrista, pero que trabajaba en piscinas, no en la playa.
Intenté que respirara todo el tiempo. Eso me impedía respirar todo el tiempo y tragué mucha agua. Podría haber perdido el conocimiento varias veces. Cuando finalmente llegué a tierra en la playa, la sostuve frente a mí.
Dijo que la última vez que vio a Konanki fue cuando ella caminaba en agua hasta las rodillas.
La última vez que la vi, le pregunté si estaba bien. No escuché su respuesta porque empecé a vomitar toda el agua de mar que había tragado.
“Después de vomitar, miré a mi alrededor y no vi a nadie. Pensé que había cogido sus cosas y se había ido”, dijo Riibe.
“Me sentía muy mal y cansado. Me recosté en una tumbona y me quedé dormido porque no podía ir muy lejos”.
El sol y los mosquitos despertaron a Riibe, dijo, y fue a la habitación de su amigo a buscar su teléfono y luego fue a su habitación a dormir.
“Estaba durmiendo en la habitación y mi amigo me preguntó si la había visto; le dije que no, que creía que se había ido a su habitación”, dijo Riibe. Su amigo le contó que Konanki nunca regresó a su habitación, lo que, según Riibe, le sorprendió.
Al no regresar Konanki a su habitación, sus amigos la buscaron antes de avisar a las autoridades, según la fuente policial. El grupo reportó su desaparición al personal del hotel alrededor de las 4 p. m. del jueves, según la cadena hotelera Riu.
“Después de verla alejarse mientras caminaba en el agua, nunca la volví a ver”, dijo Riibe a la estación de noticias dominicana Noticias SIN.
El pareo estilo pareo sarong de Konanki fue encontrado en una tumbona en la playa, pero no había señales de violencia, dijo previamente a CNN una fuente familiarizada con la investigación.
La desaparición de Konanki se produce casi dos meses después de que cuatro turistas se ahogaran en Punta Cana, según la agencia de Protección Civil de República Dominicana, en la misma playa donde fue vista por última vez. Fuertes corrientes arrastraron a los turistas de la playa Arena Gorda, donde se ubica el Hotel Riu República, informó la agencia de Protección Civil el 18 de enero en una publicación de Facebook.
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