¿Podrían las vacunas contra la gripe aviar ayudar con los altos precios del huevo? Expertos dicen que no es tan simple
Por Jen Christensen, CNN
En su primer día de trabajo la semana pasada, la nueva secretaria del Departamento de Agricultura de EE.UU., Brooke Rollins, celebró una reunión para revisar las opciones de la agencia para controlar el brote de gripe aviar y posiblemente ayudar a reducir el precio de los huevos.
En otra reunión la semana pasada, Rollins se reunió con más de una veintena de granjeros para escuchar sus ideas sobre cómo combatir la gripe aviar. Les prometió un alivio.
“Este problema no se creó de la noche a la mañana, y nos llevará un poco de tiempo abordar este tema, pero tomaremos acciones agresivas para ayudar a nuestros agricultores avícolas a combatir la gripe aviar y hacer que los huevos sean asequibles nuevamente”, dijo.
En la campaña del año pasado, el presidente Donald Trump prometió reducir todos los precios de los alimentos desde el “día uno”. Pero de diciembre a enero, los precios de los alimentos tuvieron el aumento mensual más brusco en más de dos años.
Los economistas culpan a los huevos. El precio de los huevos aumentó en ese período a la tasa más rápida en casi una década, según el Índice de Precios al Consumidor más reciente. A menos que algo cambie, prevé el departamento de Rollins, los precios de los huevos seguirán aumentando más de un 20% este año.
Una razón por la que los huevos son caros y a veces difíciles de encontrar es un brote de influenza aviar altamente patógena, comúnmente llamada gripe aviar.
Se ha convertido en una amenaza “mayor” para los rebaños comerciales y de traspatio en Estados Unidos, golpeando con mayor fuerza a las gallinas ponedoras, según el Consejo Nacional del Pollo. Estas gallinas representan más del 77% de los más de 162 millones de aves afectadas por el virus desde que comenzó el brote.
Estados Unidos ha tratado con éxito brotes esporádicos anteriormente, dijo el Dr. Matt Koci, profesor en el Departamento Prestage de Ciencia Avícola en la Universidad Estatal de Carolina del Norte, especializado en inmunología. Aunque se estudiaron vacunas avícolas, las medidas de bioseguridad y la eliminación de los rebaños con aves enfermas han sido la estrategia utilizada para enfrentarse al virus.
Los casos entre las gallinas típicamente surgían solo cuando las aves salvajes, que pueden ser portadoras de la enfermedad, migraban a través de Estados Unidos, dijo Koci. Después de que habían volado, los conteos de casos caían a cero.
Ahora, sin embargo, hay tanto virus en circulación que ha aparecido en aves residentes y ha pasado a otros animales como vacas, gatos e incluso delfines.
Muchos científicos creen que es poco probable que el virus desaparezca completamente de Estados Unidos nuevamente.
“Ahora que siempre está aquí, como dando vueltas en el medio ambiente, estamos viendo estos pequeños brotes de casos surgiendo todo el tiempo”, dijo Koci. “Esperábamos que fuera un fenómeno aislado, pero esto definitivamente parece ser la nueva normalidad”.
Cuando un pollo, pavo o pato doméstico se enferma, es devastador para el rebaño. Las aves salvajes pueden vivir con el virus, pero los rebaños comerciales a menudo no pueden.
“Depende de la cepa, pero dentro de 48 horas, un granjero puede pasar de ver unos pocos pájaros muertos a la mitad de su rebaño, y ciertamente, dentro de tres a cinco días, todos están muertos”, dijo Koci. Los miembros sanos del rebaño a menudo son sacrificados para ayudar a detener la propagación. “Esa es la razón por la que lo erradicamos. Estamos tratando de matarlos antes de que lo haga el virus, porque es una forma horrible de morir, y eso nos ayuda a contenerlo”.
En los últimos 30 días, la gripe aviar se ha confirmado en 134 rebaños comerciales y de traspatio en EE.UU. hasta el lunes, afectando a 18,91 millones de aves, según el USDA.
La agencia requiere que los granjeros informen cualquier caso y luego comiencen sacrificios masivos para limitar la propagación. Es un enfoque que el Gobierno de Trump culpa por los altos precios de los huevos.
El director del Consejo Económico Nacional, Kevin Hassett, dijo en “Face the Nation” de CBS que estaba trabajando con la secretaria del USDA para encontrar opciones para combatir la gripe aviar más allá de sacrificar gallinas. Culpo a las estanterías vacías de huevos en su tienda de comestibles por el enfoque del presidente Joe Biden hacia el brote.
“Eso sucedió porque mataron a todas las gallinas, y lo que necesitamos hacer es tener mejores formas con bioseguridad y medicación y así sucesivamente”, dijo Hassett.
Cuando el brote comenzó en 2022, muchas granjas comerciales intensificaron las medidas de bioseguridad, como aislar a las gallinas de las aves silvestres, mantener limpias la ropa y las botas de los trabajadores, y rociar desinfectantes.
“Siempre se puede hacer más, claro”, dijo Koci.
Algunos medicamentos están en desarrollo, pero nada puede curar a las gallinas con gripe aviar. La eliminación es uno de los enfoques más efectivos, dijo Koci.
“Por feo que sea, al igual que con los incendios forestales en California, a veces tienes que talar todos los árboles y cavar una línea de fuego para evitar que el fuego se propague de un vecindario a otro”, dijo. “No podemos hacer nada para salvar esa casa avícola, pero tal vez podamos cavar una línea lo suficientemente amplia a su alrededor para salvar a las granjas vecinas”.
Algunos políticos han sugerido vacunar a las gallinas. Hay algunas opciones disponibles, y el Gobierno de Trump ha dado luz verde condicional a una hecha por Zoetis.
Zoetis inicialmente obtuvo un contrato para crear una vacuna contra la gripe aviar para gallinas del Almacén Nacional de Veterinaria del USDA en 2016. Al igual que con una vacuna contra la gripe humana, la compañía ha tenido que seguir actualizándola para asegurar que coincida con la cepa del virus en circulación. Parece ser efectiva; el Servicio de Pesca y Vida Silvestre de EE.UU. la utilizó en 2023 para proteger a los cóndores de California en peligro de extinción. Pero la industria avícola comercial no está tan interesada.
Por un lado, EE.UU. es el segundo mayor exportador de productos avícolas en el mundo, pero los socios comerciales en el extranjero no comprarán gallinas vacunadas contra la gripe aviar.
La Organización Mundial del Comercio no prohíbe la venta de aves vacunadas de manera categórica, pero otros países no las comprarán. El vendedor debe demostrar que las aves están completamente libres de gripe aviar, y las vacunas pueden enmascarar la presencia del virus. Los estudios muestran que las vacunas pueden evitar que una gallina desarrolle enfermedad severa, pero no previenen totalmente las infecciones.
El Caucus de Gallinas del Congreso escribió al USDA el 13 de febrero para recordar a los responsables de políticas que “vacunar a cualquier sector avícola – ponedoras de huevos, pavos, pollos de engorde o patos – pondrá en peligro todo el mercado de exportación de todos los productos avícolas de EE.UU.”
El caucus dijo que si los agricultores no pueden comerciar en el extranjero, EE.UU. enfrentaría una posible pérdida económica anual de más de US$ 10.000 millones, así como un daño significativo a su negocio avícola.
“Hasta que tengamos garantías por escrito y protecciones comerciales en su lugar con todos nuestros socios comerciales”, dijo el Consejo Nacional del Pollo, la asociación comercial de la industria, en un correo electrónico a CNN, “el Consejo Nacional del Pollo seguirá oponiéndose a la vacunación contra la Influenza Aviar de Alta Patogenicidad”.
“Actualmente apoyamos la política de ‘erradicación’ del Servicio de Inspección de Salud Animal y Vegetal (APHIS) del USDA para erradicar el virus”, dijo.
La vacunación también aumentaría el gasto. No hay vacuna aerosolizada o en agua, por lo que los trabajadores tendrían que recoger cada una de millones de gallinas y vacunarlas individualmente.
Otros países han optado por la vacunación, y parece haber ayudado. Francia comenzó a vacunar millones de patos de granja en 2023, junto con medidas de bioseguridad y vigilancia mejorada. El número de brotes cayó a 10 durante los primeros seis meses de la campaña, en comparación con 315 en el mismo período antes de que comenzara la vacunación, según el Ministerio de Agricultura y Soberanía Alimentaria de Francia.
En los estados occidentales, los veterinarios tendrían que vacunar a animales adicionales más allá de las aves, dijo Rodrigo Gallardo, profesor de medicina avícola en la Escuela de Medicina Veterinaria de UC Davis.
La gripe aviar se ha propagado a grandes cantidades de vacas lecheras, con 973 rebaños lecheros afectados hasta el 21 de febrero, según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC, por sus siglas en inglés). “Eso solo está diseminando el virus por todas partes”, dijo Gallardo.
Se están probando varias vacunas contra la gripe aviar en vacas, pero al igual que con las aves, “la vacunación es como el último recurso para EE.UU.”, dijo.
Gallardo está de acuerdo en que se necesita hacer más para gestionar los brotes de gripe aviar en Estados Unidos, particularmente a medida que más humanos se enferman.
El virus sigue considerándose una amenaza baja para los humanos, pero hasta el lunes, 70 personas en Estados Unidos habían sido infectadas. Los trabajadores agrícolas y las personas que tienen aves en sus patios traseros corren un mayor riesgo de infección, pero los científicos están preocupados de que el virus se propague aún más, y posiblemente se adapte para transmitirse entre personas.
“En este momento, con todo este virus flotando y todas las aves y todos los mamíferos y todas las vacas lecheras infectadas, es súper difícil de controlar”, dijo Gallardo.
The-CNN-Wire
™ & © 2025 Cable News Network, Inc., a Warner Bros. Discovery Company. All rights reserved.
Meg Tirrell y Aileen Graef de CNN contribuyeron a este reporte
