El presidente de Francia Emmanuel Macron afirma que Europa “no está en la carrera de la IA”
Por Joseph Ataman y Richard Quest, CNN
Para un hombre que ha pasado su carrera luchando para lograr que Francia sea más proempresarial, las perspectivas de Europa en materia de inteligencia artificial son preocupantes: un descuido que podría costarle caro al bloque.
“Hoy no estamos en carrera”, dijo el presidente de Francia, Emmanuel Macron, a Richard Quest de CNN en una entrevista exclusiva en el Palacio del Elíseo el jueves. “Nos estamos quedando atrás”.
“Necesitamos una agenda de IA”, dijo, “porque tenemos que cerrar la brecha con Estados Unidos y China en materia de IA”. El líder francés agregó que teme que Europa se convierta en un mero consumidor de IA y pierda el control sobre la dirección y el desarrollo futuros de la tecnología.
Eso es parte del impulso detrás de la cumbre de IA de esta semana en París, el más reciente esfuerzo de Macron para poner a Francia en el centro del debate y la toma de decisiones sobre las cuestiones internacionales del día.
Macron promociona periódicamente las perspectivas de la empresa Mistral, con sede en París, considerada ampliamente como el competidor europeo de OpenAI, que lanzó una nueva aplicación el jueves.
La compañía se jacta de su capacidad para rivalizar con sus competidores estadounidenses, obteniendo los mismos resultados con menos potencia de cálculo necesaria, aunque la llegada sorpresiva de su competidor chino de menor coste, DeepSeek, ha presionado a la firma francesa.
Con su cartera de energía fuertemente nuclear, que convierte a Francia en un exportador neto de energía, el país está en una posición envidiable para la creación de centros de datos con gran consumo de energía.
Francia se dispone a revelar lo que su gobierno afirma es la supercomputadora más grande de Europa para el otoño de 2025, en las afueras de París.
El emplazamiento de Mont Valerien será una instalación militar que aportará capacidades de inteligencia artificial a gran escala para ayudar a resolver cuestiones de diseño e ingeniería, como la arquitectura de los próximos portaaviones de Francia. La inteligencia artificial también se utilizará para mejorar las futuras tecnologías y prácticas militares, como la prevención de interferencias de drones, según el Ministerio de Defensa francés.
Esa es la excepción. Dado que Europa posee apenas entre el 3 y el 5% de la potencia informática mundial, Macron dijo que espera que este excedente de potencia abra las puertas a la inteligencia artificial del futuro europeo. Su objetivo es construir el 20% de los centros de datos del mundo.
Pero la financiación, especialmente de Estados Unidos y de los países árabes del golfo, será clave, según Macron.
Es aquí donde Europa “debe hacerlo mucho mejor”, afirmó Macron.
Encontrar dinero en efectivo dentro del continente podría ser una bendición involuntaria si las amenazas arancelarias del presidente de EE.UU. Donald Trump contra los aliados europeos llegan a un punto crítico.
“Desde el punto de vista de Estados Unidos, la UE nos trata de manera muy, muy injusta, muy mal”, dijo Trump en el Foro Económico Mundial en enero, y luego amenazó con imponer aranceles contra el bloque después de aplicar, y luego derogar, significativos impuestos a las importaciones de Canadá y México.
Los aranceles generalizados del 10% que Trump impuso a China siguen vigentes, y el presidente dijo que anunciará la próxima semana nuevos aranceles llamados recíprocos que podrían afectar a todos los rincones del mundo.
Trump ha criticado el déficit comercial de Estados Unidos con la Unión Europea, que aumentó de US$ 26.900 millones hasta US$ 235.600 millones en 2024, según cifras del gobierno estadounidense.
Macron se opuso a esto, argumentando que el déficit comercial ignora el importante gasto de Europa en servicios digitales, que a menudo se excluye de dichos cálculos.
En respuesta a los posibles aranceles, Macron dijo que Europa debe buscar proteger a los productores contra la competencia estadounidense y china y, fundamentalmente, flexibilizar la regulación de las inversiones para frenar la “fuga” de los ahorros europeos hacia Estados Unidos. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, reflejó esa postura resuelta la semana pasada.
La competitividad es clave, dijo Macron a CNN.
“Lucharé por la inteligencia artificial”, afirmó, y pidió un entorno empresarial que haga que Europa sea más competitiva. “Lucharé por más respuestas en materia de defensa y seguridad como europeos. Y lucharé por el máximo nivel de ambición en todas estas cuestiones”.
Febrero y marzo traerán anuncios y una hoja de ruta de reformas en torno a las regulaciones de las empresas emergentes de inteligencia artificial, dijo Macron, en un esfuerzo por rivalizar con la agenda de inteligencia artificial de Estados Unidos y China.
“Tenemos que enfocarnos en acabar con algunas regulaciones absurdas y simplificar el entorno actual”, dijo Macron. “Europa tiene que simplificar sus normas, hacerlas mucho más favorables para las empresas y sincronizarse con Estados Unidos”.
Espera que, al menos en lo que respecta a la IA, la cumbre de esta semana sea una “llamada de atención” para Europa.
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